30 julio, 2016

Arrastró su sombra
como un buey
como una sola verdad
en el puño de la mano.
En la piedrita del primer adiós 
dejame lo dejado
el timbre que no suena
los sueños que no sueñan
los barcos que se llevan.
Escribe en la tinta y suda
silencios entre los látigos
de una noche larga.
Viaja sin su pájaro,
todavía
aún
cuando.

11 julio, 2016

La miseria es ese ojo ciego
tras el muro.

09 julio, 2016