Amando así, sin madre y sin casa, desgarrados de tactos y de espinas en la novela negra y las armas sagradas.
Lo único que sé es que mi amor y tus camisas se leen juntos.
Soy la que habla con las Palabras, a veces también hablo con el viento pero
el viento pasa sin demora mientras la tierra gira en el puño del amor, y yo
quedo bahía, sanando esos puños con Palabras.
Recita madrugadas contra los vidrios
y se hace Letra en ese pacto
de ardor y luces.
09 julio, 2018
Hay un baldío donde los demonios
triunfan o premian.
Cerca de la piedad o el castigo,
sin brújula donde
dejó su ferocidad, su probable Poeta
cualquier cornisa.
Hasta el impío tiembla frente
a su abismo.
En qué azar, en que marcha del frío
en qué paladar sin cuerpo arde el mundo y se enfría la escarcha.