30 agosto, 2009

No existe el abril del día perfecto, la rama
del costado, tanto abrazo de espaldas
a la luna, esa oblicua tangente voluntad
de hacerse mayo, y quedar hoja.

29 agosto, 2009

La noche huele a fueguitos turbios,
a banda de azahares, huele a rincones.
La vida hostiga,
no pecar, qué gran pecado.
Salieri busca su voz y le duelen
violines de sombra. Ruedan palabras
como puños secos. Un puñado de puños
jamás será Poema, jamás Amor.

11 agosto, 2009

En qué arroces incrusto la
piedad.
Lanzó un captura-mariposas, por
un día el olvido fue color.
Por qué encender la copa y mirarse
a la sombra de las luces si hoy es
noche de escamas.
Azul botija un pedro, huella cordones,
custodia alcantarillas.
Cuidamos las sombras, hacemos días en ollas
usadas, confiamos en cada mañana, en el guiso
del pan de la panera. Somos más que el mantel
y menos que nuestra esperanza.

10 agosto, 2009

Amarrado al clavo de olor, a la leche de arroz,
herido de canela y menta, labriego encadenado,
tan Minotauro sucumbido infancia.
Aquí desagotan las tristezas, los corchos, las
miserias, las tardes sin amor. Un perro aúlla
noches de seda desde una costura de la luna,
y yo le digo lobo.
Esa sombra que compraste espejo y duerme
tus noches, afila con un corcho cada cuchillo
hasta que la cuerda sea sólo ausencia.
Y si soy una pisada tuya.
Si soy sólo la huella de tu arena.
Combá la cuerda, recorrela ríspida, hasta
que este Blues se haga templo.
Un fósforo lo enciende vino, arde luz,
ebrio y sensual regresa de su largo destierro.
Yo me Olimpo en sutil engaño y que Apolo me
diga –llegó el Poema, y yo me engañe.

01 agosto, 2009

Quién te escupió huecos donde los pájaros
hacían nidos, peñón de ausencia.
El fuego de la sombra quema
pájaros, Palabras replegadas sobre
una cicatriz.
Ahí donde no hay nada, todo lo consume,
voraz como el asombro calla hasta que
las grietas den su última sal.
Barro, Tinaja, Barca Morena soy,
entre mis mares tengo un lienzo de
seda y un puñado de arenas.