Poemas aún sin publicar superan los 2000.
Ellos hablan sólo por acá, todavía.
28 noviembre, 2019
No era Latín, eran sus
lágrimas.
Los libros enterrados
y los amigos,
tanto Silencio
Esta lágrima
esta rosa sobre
los dos Poemas de aquel
naufragio.
16 noviembre, 2019
Valdivia es el origen del
destierro
y eso amarra, deja los
nombres en
el incestos de sus días.
Quién dijo que el origen era
Valdivia
y no los restos de esa
decepción.
Un catálogo de abrazos en
tiempos
de pronto, sin Palabras, en
goteo léxico,
enredados en la mala Letra.
Canta la mujer chamana
juega a las Palabras
las transita de una luna
a otra
explora entre el barro
y la espiga,
se hace harina y canta.
Tanto destino de horas, tanto
Madrid
sin llave. Alguien lleva minutos a su hueco
tartamudo. Otro consuela la
lluvia y
se consuela. Ninguno sabe de
la calle
de las hojas y los
pronombres.
Un fractal
la millonésima parte de sí
mismo
su precipicio.
Hasta recién sonaba su lírica
de
posguerra,
el balbuceo esencial.
Soy las manos en la lluvia
un viento que sopla, nacida
alma y borde,
una ventana exiliada,
la pequeña flor que gira
entre
sus pétalos,
soy quien guarda la noche
en la Palabra.
hiereesa esquina y te deja barro
razón vuelta silencio.
15 noviembre, 2019
Con tanto desamor en las
costuras y lunas
entregadas, con tantos patios
en los ojos del vino.
La primera tierra, una panera
y las migas
con olor a amanecer.
Ha guardado su nombre
y estaba
sobre la herida,
sobre la punta de su sombra
sobre la sombra,
sobre la punta de su sombra,
sobre su herida.
Diría la palabra membresía,
la vida es más
que una uva, son las costumbres
la próxima estación
el -tú has sido.
Hemos dado luz a las sudadas
sombras.
Como la araña nos tejimos en
el idioma,
y a esa luz, calladamente, la
tejimos.
En esta Ciudad que no se
calma, en todas
las Ciudades, sobre la furia
y los escombros,
hasta que un pájaro se paró
sobre la herida.
Mete a Dios en el Palacio y
hunde
la madera.
Hay un cristo, millones,
ejecutados
por una cruz.
El refugio de la oruga cien años de mariposa en un caparazón
en una espera.
Los he visto desnudando
calles, los he visto
de metal y espanto, los he visto
-paren, apunten... tu ley, mi ley, ninguna ley,
los he visto doblando sombras en la otra parte
del cuerpo de alguien,
clavando un vaso sobre la Palabra.