Textos desde 2007 a la actualidad.

Brevedades. Que los Trazos sean flechas
como las que arroja el Inconsciente cuando
nos deja arrojados.
..........

Y el infinito Trazo se sigue escribiendo.
Escrituras sin publicar.

18 septiembre, 2024

Dame tus aguas, esa flor

ronca,

grita tus días y tus ríos,

acá, en medio

de la noche

Yo tengo mis huracanes

mis sigilosos te quiero.

Hay una frazada partida

Una espina sobre

el Mundo.

Esa mitad, la carne sacudida,

la dureza del amor

las noche y sus cestos

de gloria

Aquí entran los guijarros

y la nieve

lo postrero,

la redimida gota de ese mar

los rincones sin corona

Todo tu amor cabe este

atroz silencio.

 Una cosa es la sombra

y su revuelta,

la dicción de estos

versos,

aquí el alud es la Palabra,

el animal que la

acompaña

la vida puesta en otra

parte.

Hay que deshacer el dolor

y la retórica

ahondar las voz hasta

el objeto que la

causa.

El hecho sensorial será

la nueva raza,

-dicen.

Trozos y versos en la

madrugada.

Así son los regresos.

El hambre sin voz es aire,

daga,

fuego arrojado

al azul

El Poema de pan es un

desgarro que

cuece su sombra en

el vacío.

Todo es antes y después,

las manos,

los temblores

las preguntas

No hay dónde esconder

las bocas ciegas,

dónde la vergüenza.

Nunca, nada, siempre

de otros, de acá de allá,

algunos de ellos dijeron

otros se encontraron

 

De qué habla este mapa,

habla del corazón del

Mundo?

del abandono que clava

sus tijeras en la

herrumbre?

 

Pido mar y canto

piedra libre para mí.

Un pormenor, un detalle a resolver

una voz inventando el artificio

de vivir,

dispersión de manos y

de bocas todas

Hay lechos y sed y cuerpos, entre

la carne y la Palabra

sólo podemos encontrarnos si

nos esperamos.

En este instante desierto

sin dolor

ni sensatez

en estado de Lenguaje,

entre hábitos y

Palabras,

donde se guardan sonidos

y silencios,

escuchemos esos versos,

aquí,

en esta tierra detonada

en la que sólo hay

roca,

arena

y cristal.

Escribía como si la vida no la

estuviera esperando,

tan fuera de su cuerpo

tan distante

Le ha prometido la llaga

a otra boca.

Amor, estallan las puertas,

nunca es paz

nunca es pez

son altas las cumbres,

es indispensable la simple

línea de la especie,

las manos entrelazadas,

la tregua del amor.

Entre las manos y el mar,

el tiempo,

pulsando,

creando calendarios.

Se va el invierno pero

queda merendando

entre mis palmas

-Amor, yo te escucho

todavía,

la muerte es sólo madera

levantada,

hay que barrer magnolias

levantar tejados

En esta región es la violeta

la que siempre me dice,

-él te ama, y yo le creo

cada septiembre.

A este panal de tierras

y de rastros,

a esta batalla de viejos

ganadores por punta de fusil

o de mala siembra,

en este aquí de máscaras

en medio de tantos cantos

deshojados

vos traías la luna hasta

mis ojos. 

Cubrime de sueños desde

tu alma hasta

la gota,

sin simetrías,

con el mar golpeando en

los costados.

La virgen del Poema huele

a Mundo,

a espermas haciendo nido

entre la carne.

En este huracán sordo

hagamos extenso el

nombre.

Él era un navegante

ella una diosa sin manto

Quien custodia mares

entiende

Algo roza las alas de ese

ángel

sus párpados eran puertos,

tribunas aguerridas.

Alguien queda en el destino

de aquella aurora.

Hay raíces y labios

hay maderas y caminos

por qué me quedo en su

Letra, entre luces

y sombras.